El Diseño Biofílico
Si queremos estar a la vanguardia en proyectos de interiores, así como arquitectónicos aquí en Los Cabos, les comparto un término que está muy en boga en todo el mundo: diseño biofílico.
Remontándonos al significado etimológico de la palabra Biofilia, nos encontramos que “bio” significa vida y “filia” significa afinidad o amor por algo.
El término “biofilia” significa literalmente “amor a la vida” y fue acuñado por primera vez por el psicólogo Eric Fromm en su libro “El Corazón del Hombre” en 1964. Posteriormente el biólogo Edward Wilson lo popularizó en su escrito llamado “Biofilia” de 1984.
Diseño Biofílico entrelaza las relaciones entre la naturaleza, la biología humana y el diseño de entornos construidos para que podamos experimentar sus beneficios aplicados al diseño.
Es hasta hace pocas décadas que se comenzó a tomar en serio este término en el diseño de interiores y la arquitectura. Eso sí, muchos proyectos ya tenían en la vegetación uno de sus principales pilares. Se trata de nuestra inherente conexión humana con el mundo natural. En un mundo urbano de tecnología y arquitectura industrial, a veces puede parecer que esta conexión fundamental se ha perdido casi por completo. El diseño biofílico es una forma innovadora de aprovechar esta afinidad para crear entornos naturales en los que podamos vivir, trabajar y aprender. Al incluir conscientemente la naturaleza en el diseño arquitectónico y de interiores, nos estamos reconectando inconscientemente, incorporando los grandes espacios al aire libre a nuestro mundo construido.
Su futuro es relevante, ya que los humanos pasamos el 90% de nuestro tiempo en interiores de hogares, edificios y oficinas y numerosos diseñadores ya lo están llevando a cabo de manera casi exclusiva.
¿Cómo aplicar la Biofilia en el Interiorismo?
Lo más básico sería poner plantas en cualquier espacio (muchas de ellas) o instalar paredes verdes. Pero la Biofilia en interiorismo, no sólo se reduce a la utilización de plantas, sino que igual de importantes son otras decisiones: las ventanas que conecten los espacios con el jardín o exteriores, la utilización de materiales naturales y biodegradables, optar por una distribución que contribuya a la mejor circulación del aire o hasta instalar imágenes que recuerden a la naturaleza.
Buscando el tema de sostenibilidad, sabemos que para la salud humana resulta crucial incluir los sistemas y procesos naturales en nuestros edificios y paisajes construidos. Más de 50 estudios en todo el mundo, han demostrado los efectos positivos que la naturaleza o los entornos que imitan a la naturaleza tienen en la salud y el bienestar en general.
Existe una correlación directa entre el diseño inteligente de los espacios de trabajo y un mejor rendimiento y bienestar de los trabajadores. Incluso sencillos cambios realizados a fin de incorporar la naturaleza en el lugar de trabajo pueden tener un impacto enorme en la forma de sentirse de los trabajadores, así como en lo contentos, creativos y productivos que se sienten al desarrollar su oficio.
Actualmente, el diseño biofílico está siendo impulsado como estrategia complementaria para enfrentar el estrés en el lugar del trabajo, el desempeño estudiantil, la recuperación de pacientes, la unión comunitaria y otros retos para la salud y bienestar familiar.
Implementar este término a nuestros proyectos traerá una repercusión positiva y enorme para toda nuestra sociedad.